Según el Misnistro de Salud, citado por la agencia AP, hay ya 3 personas que perdieron la vida durante los enfrentamientos. Una de ellas pertenecía al ejército.
Los heridos por otra parte, alcanzaron los 1500 según la agencia oficial Reuters y la cadena árabe Al Jazeera, que anunciaron que el Gobierno había dado cuenta de la cifra.
Los cronistas y fotógrafos testigos vieron cientos de heridos, después de que los partidarios de Mubarak lanzaran piedras masivamente durante más de una hora contra los manifestantes que piden desde hace 9 días la renuncia inmediata del mandatario.
La violencia y el descontrol invaden las principales calles de El Cairo y se desencadenaron una serie de enfrentamientos con palos y piedras. Hubo estampidas, y hasta cargas a lomos de caballos y camellos.
Las imágenes de televisión de la cadena Al Jazeera mostraron enfrentamientos a puñetazos, carreras y lluvias de piedras, aunque el Ministerio de Interior lo niega.
Asimismo, el Museo Egipcio fue incendiado por cócteles molotov lanzados por los participantes en los enfrentamientos.
Decenas de bombas molotov fueron lanzadas contra uno de los flancos del museo desde las azoteas de edificios cercanos.
Además, los manifestantes contra el régimen de Mubarak fueron atacados con gases lacrimógemos cerca de la plaza Tahrir, en el centro de El Cairo.
Hay soldados desplegados en el área, pero no policías uniformados.
Los manifestantes antirégimen argumentan que policías vestidos de civil participan de los disturbios, en los que centenares de personas resultaron heridos.
El Ejército trata de frenar los enfrentamientos y afirman que los militares hicieron disparos de advertencia.
Por su parte, el portavoz de la Casa Blanca, Robert Gibbs, anunció la "profunda preocupación" del gobierno norteamericano por los incidentes desatados. En un comunicado aseguró que Washington "deplora y condena" la violencia.
"Reiteramos nuestro fuerte llamamiento a la contención", agregó. (Infobae)