Joya, presidente de la opositora Coalición Nacional Siria (CNFROS), cuya sede principal está en El Cairo, aún no definió la fecha para su visita aunque según el vicepresidente de la Alianza, Hisham Marwa, será en breve.
"Hemos aceptado, en vista de los últimos acontecimientos políticos y militares y porque apostamos por una solución política al conflicto", explicó Marwa, quien agregó que cualquier salida política debe tener como base el Comunicado de Ginebra, informó la agencia de noticias EFE
Dicho documento fue acordado por las potencias en 2012 y aboga por la creación de un gobierno interino en Siria integrado por miembros del actual ejecutivo, liderado por Bashar al Assad, y de la oposición que no hayan cometido delitos de sangre.
Moscú, que junto con Teherán son los principales aliados de Damasco en la región, ha auspiciado este año dos rondas de diálogo -en enero y abril- entre las autoridades sirias y grupos de la oposición tolerada por el gobierno, a las que la CNFROS rechazó acudir por considerar que no ofrecían garantías de que abrieran paso a una transición política.
Ayer por la tarde, los cancilleres de Siria, Walid al Mualem, y de Irán, Mohamad Yavad Zarif, así como el vicecanciller ruso y enviado especial para la región, Mijail Bogdanov, mantuvieron encuentros bilaterales y una reunión trilateral en Teherán, informó hoy la agencia iraní Fars,
Tras la reunión, Bogdanov subrayó que Moscú mantendrá su postura frente al gobierno sirio de cara a los cambios de estrategia ocurridos hace dos semanas cuando el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, que apoya a los rebeldes sirios, ordenó bombardear posiciones de los kurdos y el Estado Islámico (EI) en Siria.
"Nuestra posición no ha cambiado sobre Siria, y creemos que los sirios, su gobierno y la oposición, deberían sentarse en la mesa de negociaciones y decidir su futuro de tal forma que su independencia se mantenga y se asuman todos los intereses de grupos y tribus", dijo Bogdanov.
Además, reveló que luego de reunirse días atrás con opositores a Al Assad -como Turquía y Arabia Saudita-, ahora fue el turno de "escuchar la visión iraní para decidir sobre acciones futuras".
En tanto, los combates continuaban en Siria, donde hoy varias facciones rebeldes mantuvieron combates con las fuerzas gubernamentales en las que al menos 41 personas murieron, informó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
Tras los combates, los insurgentes lograron aproximarse a una importante base de las fuerzas gubernamentales y de su aliado, el grupo chiita libanés Hezbollah, en el noroeste de Siria, aseguró el OSDH, que tiene su sede en Londres pero cuenta con una red de informantes sobre el terreno.
Los insurgentes tomaron hoy el control del pueblo de Al Bahsa, a menos de 2 kilómetros de la zona de Yurín, donde se ubica el cuartel desde el que se dirigen las operaciones de los leales al gobierno de Damasco en la planicie de Al Gab, en la provincia de Hama.
Entre los combatientes que se oponen a los efectivos progubernamentales, hay miembros del Frente al Nusra, rama siria de Al Qaeda, así como guerrilleros de Chechenia y Turkmenistán, indicó EFE.
En tanto, un importante comandante tribal próximo al gobierno sirio murió durante una batalla en la periferia de la ciudad siria de Deir Ezzor.
Abdel Baset al Rayeb, líder del Ejército de las Tribus, luchó contra las tropas gubernamentales hasta que el grupo yihadista EI entró en Deir Ezzor. En ese momento, se pasó al bando de Al Assad.
El Observatorio explicó que Al Rayeb fue objetivo de un ataque en la zona del monte Al Zarda, próximo a la base aérea de Deir Ezzor, aunque no precisó la fecha de su muerte.
Fuente: Télam