"Se ven cadáveres tirados en las calles, edificios caídos, y otros tantos seguramente con gente adentro", describió, al tiempo que remarcó que "la situación de la salud va a ser preocupante en 24 horas".
Además de no haber luz, el agua potable, que normalmente es en Haití sólo para un sector privilegiado de la sociedad, no es recibida ni por esos pocos.
"En 24 horas no va a haber comida, ni agua y se teme que se desate una situación de saqueos y violencia social", subrayó el canciller.
A ese escenario se suma que los tres hospitales más importantes de la ciudad cayeron con el sismo. Así es que la atención médica a los miles de heridos corre por cuenta de la asociación Médicos sin Fronteras, del Hospital Militar argentino y de cooperación recibida por parte de Cuba.
Consultado acerca de la cifra de víctimas fatales, Vázquez Ocampo aseguró que "se habla de 100 mil afectados, entre muertos y heridos, pero se trata de estimaciones muy poco confiables".
Fuente: infobae.com