En la escueta carta de dos puntos las FARC también ratificaron que en el proceso de liberación debe participar la senadora de oposición Piedad Córdoba, el profesor Gustavo Moncayo, el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) y la Iglesia Católica.
Moncayo es el padre del cabo del Ejército Pablo Moncayo, el uniformado que mayor tiempo lleva en poder de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), más de 12 años.
El cabo Moncayo junto al soldado Josué Calvo son los militares que las FARC se ofrecieron a liberar desde abril pasado pero el proceso se ha retrasado debido a falta de consenso entre la guerrilla y el gobierno respecto de la forma como se debe llevar a cabo el operativo de rescate.
Además de los uniformados, el grupo se comprometió a entregar los restos del mayor Guevara, quien falleció en las selvas de Colombia en 2006, según las FARC, a causa de una extraña enfermedad.
En la comunicación el grupo no se refirió al secuestro y posterior asesinato del gobernador del Caquetá Luis Cuellar, cometido al parecer por un comando de la organización insurgente, que está activa desde hace más de 45 años.
Luego del asesinato del gobernador el presidente colombiano, Alvaro Uribe, ordenó el rescate por la vía militar de todos los secuestrados, incluidos Moncayo y Calvo.
Analistas en Colombia consideran que el asesinato del gobernador puede truncar el proceso de liberación de los dos uniformados, pero este fin de semana la senadora Córdoba indicó que el hecho no será un obstáculo.
El nuevo pronunciamiento de las FARC se conoció en momentos en que en Colombia fue hecha la vigilia radial anual que organiza el periodista colombiano Herbin Hoyos para recordar a los secuestrados en Colombia.
La vigilia de este año tuvo como novedad que se realizó paralelamente desde Madrid, donde Hoyos tuvo que exiliarse desde octubre pasado tras amenazas que recibió en su contra, al parecer por parte de las FARC.
El grupo guerrillero también fue responsabilizado este domingo de la quema de dos ómnibus del servicio público en el municipio de Cabrera, en el departamento de Cundinamarca (centro).
Según el Ejército, en la zona de la quema sus tropas sostienen fuertes combates contra la cuadrilla 51 de la FARC.(Telam)