El atentado en Sadr City fue el más sangriento en una jornada en la que un total de 47 personas fallecieron
Tras el estallido, fuerzas de seguridad cortaron el acceso al mercado e impidieron el tráfico de vehí­culos para prevenir más ataques.
Aunque nadie se atribuyó la autoría del ataque, las sospechas recaen sobre grupos insurgentes sunnitas que llevan adelante una campaña armada contra la gobernante comunidad chiita, como el Estado Islámico de Irak y el Levante, vinculado a Al Qaeda.
El atentado en Sadr City fue el más sangriento en una jornada en la que un total de 47 personas fallecieron en ataques en distintas provincias de Irak, que desde hace varios meses vive un repunte de la violencia.
En otro sangriento hecho, al menos 11 milicianos de este gurpo yihadista fallecieron en enfrentamientos con el Ejército iraquí en la zona de Al Taamim, en el oeste de Ramadi, y en Al Huz, en el centro de esa ciudad, informó la agencia de noticias EFE.
Otros cuatro supuestos combatientes de ese mismo grupo perecieron en choques similares con las tropas iraquíes en la zona de Saba Kilo, ubicada al este de Ramadi.
En la provincia de Salahedin, al norte de Bagdad, dos integrantes de la milicia progubernamental Consejos de Salvación murieron y otros dos sufrieron lesiones en un ataque armado contra su puesto de control en la zona de Al Sharqat, al norte de Tikrit.
Además, un civil murió y otros cinco sufrieron heridas por el estallido de un coche bomba en la plaza de Mudafar, en la zona de Madinat al Sadr, en el este de Bagdad.
La explosión de una bomba al paso de un colectivo de transporte público en el barrio de Al Shaab, en el noreste de Bagdad, causó la muerte de un civil y heridas a otros dos.
Irak afronta un aumento de la violencia confesional y de los atentados de grupos extremistas, que causaron en 2013 la muerte de más de 8.860 personas, de las que 7.818 eran civiles, según datos de la ONU.
Fuente: Télam