La medida es un trámite administrativo para facilitar la coordinación entre los distintos departamentos del gobierno y para poder acceder a la ayuda federal.
El fenómeno se encuentra en estos momentos en Bahamas y se espera que llegue a Carolina del Norte el sábado en horas de la tarde.
Bloomberg aseguró que si la situación empeorara, estaría facultado para ordenar una evacuación obligatoria que afectaría a 270.000 vecinos.
Posteriormente, el gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, fue quien declaró la emergencia: "Estoy activando todos los niveles del gobierno del estado para prepararnos para cualquier situación que pueda causar el huracán Irene", dijo.
Las medidas preventivas consisten en aumentar el límite de los generadores eléctricos y reforzar los drenajes ya que hay riesgo de inundaciones en Battery Park, en el sur de Manhattan, y en South Beach y otras áreas de Staten Island.
Por su parte, el gobernador de Nueva Jersey, Chris Christie, una vez declarado el estado de emergencia, pidió a los residentes de las islas de la costa que evacuaran la zona de forma voluntaria, aunque tampoco descartó tener que ordenarlo por decreto.
En tanto, en Carolina del Norte, la emergencia obligó a un condado a emitir una orden de evacuación obligatoria para miles de residentes. Con este decreto, las agencias del gobierno se hacen de poderes especiales para "promover y garantizar la protección de la población".
Fuente: infobae.com