Sharon pudo salvar su gobierno al conseguir en la Knesset (parlamento israelí) el rechazo a tres mociones de censura contra su administración.
El premier israelí, a la cabeza de un gobierno minoritario tras la retirada de los laboristas el 30 de octubre pasado, se benefició del apoyo del "Bloque de la Unión Nacional", coalición que agrupa a tres partidos de extrema derecha y que cuenta con 7 diputados. Esta coalición negocia con el Likud, el partido del primer ministro, su eventual ingreso al gobierno. (Télam-SNI)