"Esta es nuestra plaza", "Menos policía, más democracia", "El pueblo unido jamás será vencido" y "Únete, únete, tienes hipoteca también" eran algunos de los eslóganes que coreaban los manifestantes. La estación de metro Sol, con salida en la plaza, fue cerrada, según varios medios.
Tras el bloqueo de la policía, los "indignados" se dirigieron al Congreso y después a la estación de Atocha. Según contó una vocera de los manifestantes, darían la vuelta por la terminal y volverían a la Puerta del Sol para intentar entrar.
Asimismo aseguró: "No nos vamos a convertir en un partido político no vamos a ir a las elecciones", mientras que señaló que este iba a ser un "otoño caliente", cuando en noviembre se realicen los comicios.
"En las calles hay poca gente por las vacaciones, en las elecciones de noviembre va a ser un otoño caliente no hay hadie que proponga lo que pedimos", sentenció la vocera, refiriéndose a los reclamos que ni el partido socialista ni el popular incluyen en sus propuestas.
Algunos de estos pedidos incluyen la prohibición de los despidos en empresas que tengan beneficios, la paralización de los desahucios y el pago de impuestos más altos para los ciudadanos de mayor poder adquisitivo.
Por la mañana, la policía había evacuado de forma pacífica las pocas carpas que quedaban del campamento de los "indignados", situado en la céntrica Puerta del Sol de Madrid, para "limpiar" la plaza ante la visita del Papa a la capital española, del 18 al 21 de agosto, según los desalojados.
El campamento fue instalado allí a mediados de mayo por simpatizantes del movimiento de los "indignados", que durante semanas protestaron también en otras ciudades españolas y europeas contra las duras medidas de austeridad económica para combatir la crisis y contra los defectos de la democracia.
El movimiento, nacido en las redes sociales y sin líderes, reunió a 200.000 manifestantes el 12 de junio. El 26 de julio, un grupo de unos 50 "indignados" españoles inició una marcha a pie hasta Bruselas. (Infobae)
