Ni siquiera "podí­a imaginar", afirmó, que después de "todo lo que negociamos en tres meses" algún polí­tico pudiera proponerle a Grecia -como lo hace el plan de la CE, el BCE y el FMI- una reforma del IVA que aumente en 10% la tarifa de electricidad, y la eliminación de los subsidios a los jubilados de más bajos ingresos.
"El pueblo griego nos dice: no abandonen sus pedidos razonables. No cedan ante las exigencias irracionales", sostuvo.
En contraposición, el premier griego insistió en que su gobierno quiere una "solución integral" que también "ponga fin a los debates sobre el Grexit" (salida de Grecia del euro).
Pero el lí­der izquierdista se mostró dispuesto a seguir negociando con las tres instituciones, y pidió el apoyo de la oposición. "La decisión de ayer de transferir los pagos al Fondo Monetario Internacional (FMI) al final del mes demuestra que nadie quiere la ruptura", afirmó ante la Cámara.
El miércoles, Tsipras anunció en Bruselas que pagarí­a al FMI los 300 millones de euros que adeuda su paí­s, pero el jueves, a su retorno a Atenas, anunció la postergación del pago, con acuerdo del FMI, hasta el 30 de junio, como parte del total pendiente de 1.600 millones.
En estas circunstancias, la Bolsa de Atenas cerró con una fuerte baja de 4,96%, mientras que los costos de endeudamiento de Grecia a dos años también se dispararon, con los intereses en un alarmante 24,5%.
El í­ndice Stoxx 50 index de las principales acciones europeas, en tanto, caí­a 1%.
El gobierno de Grecia, dominado por el partido izquierdista Syriza, de Tsipras, fue elegido en enero tras prometer poner fin a los ajustes aplicados por administraciones previas a cambio de "rescates" financieros que el paí­s recibió de la Comisión Europea (CE), el Banco Central Europeo (BCE) y el FMI.
Desde hace cuatro meses, Grecia discute con sus acreedores el desembolso de los últimos 7.200 millones de euros de los 240.000 millones que recibió con los programas de "rescate" de 2010 y 2011, e intenta deshacerse o al menos minimizar la escala de las medidas de austeridad que se le exigen.
El primer ministro griego planteó en su discurso que los acreedores debí­an retirar la "propuesta absurda" de nuevos recortes presupuestarios.
La propuesta griega, menos restrictiva, es "la única realista", aseguró en un discurso que fue transmitido en directo, entre otros medios, por la BBC.
En los últimos dí­as, dada la proximidad de estos pagos y la cada vez más cercana fecha del fin de la prórroga, Tsipras intensificó los contactos al más alto nivel polí­tico para tratar de lograr un acuerdo.
El recorte de salarios y pensiones, así­ como la restauración de los convenios colectivos, fueron las lí­neas rojas que Atenas señaló como infranqueables desde el inicio de las conversaciones.
Horas antes del discurso de Tsipras, su influyente ministro de Seguridad Social, Dimitris Stratoulis, reiteró que el paí­s podrí­a verse forzado a anticipar las elecciones si los acreedores persisten en su exigencia de medidas de ajuste "inhumanas y denigrantes" y en su "chantaje".
Al respecto, el ex primer ministro y lí­der de la oposición, el conservador Antonis Samaras -que instó al Gobierno a negociar "sobre la base" de las exigencias que Tsipras rechazó- aseguró que su partido, Nueva Democracia, no teme las elecciones anticipadas, pero sin un acuerdo serían "un referéndum" sobre el euro.
El grupo parlamentario del partido nacionalista Griegos Independientes, socio menor de la coalición gubernamental, aprobó por unanimidad una resolución en la que pidió al gobierno que no se mueva en sus posiciones durante la negociación.
El ministro de Trabajo, Panos Skurletis, buscó aliviar las preocupaciones sobre las finanzas del paí­s y dijo a la radio Parapolitika que el gobierno tení­a el dinero para el vencimiento de hoy pero que decidió agrupar los pagos "por razones polí­ticas", informó la agencia de noticias EFE.
Desde agosto pasado, Grecia no recibe fondos de rescate y sin ese dinero pocos la creen capaz de cumplir con sus obligaciones a fin de mes.
También hoy, en medio de las negociaciones con sus acreedores, Tsipras habló con el presidente ruso, Vladimir Putin, sobre la posible participación de Grecia en el banco de desarrollo del grupo BRICS -Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica-, según una propuesta de Putin de principios de mayo.
Fuente: Télam