Algunos puntos del centro de la ciudad y barrios turísticos como Copacabana e Ipanema presentaban hoy grandes acumulaciones de basura, después del paso de las comparsas que llegaron a congregar a cientos de miles de personas en fiestas callejeras.
La basura sin recoger se amontonaba hasta en las gradas del sambódromo, donde anoche se celebró el primer desfile de las escuelas de samba, según consignó hoy la agencia EFE.
La Alcaldía de Río de Janeiro y el sindicato municipal de los barrenderos negaron, en un comunicado, la existencia de una huelga.
El sindicato atribuyó a un "grupo sin representatividad" en el gremio la propagación de "rumores de amenaza de paralización".
No obstante, centenares de barrenderos realizaron manifestaciones el sábado y domingo, para demandar una suba salarial de 803 a 1.200 reales (de 341 a 510 dólares), el pago de horas extras y otros beneficios.
Río de Janeiro está celebrando el carnaval, la mayor fiesta de la ciudad, que este año atrajo a cerca de 920.000 turistas, según cálculos de la gobernación.
Fuente: Télam