Los locales tuvieron la iniciativa y realizaron un mayor desgaste, antes y después del gol. A los 11 minutos, Décima probó con un remate desde lejos, pero la pelota se estrelló en el travesaño y luego hizo una carambola con el arquero Caranta, hasta salir al córner; a los 18m. Galván -el jugador más desequilibrante de San Martín- ejecutó un tiro libre desde la izquierda y exigió una gran atajada de Caranta, cuando el balón se le metía por el segundo palo; a los 25m. pudo convertir Recalde, pero no alcanzó a conectar casi al lado del arco y a los 32m. nuevamente Galván remató con zurda y su disparo salió apenas desviado junto al palo derecho.
Boca apostó al contragolpe y casi lo liquida en varias ocasiones, a partir de la rapidez de Palacio y la potencia de Palermo, argumentos por demás suficientes para vulnerar a la entusiasta defensa de los sanjuaninos. A los 28m. Palacio enredó a los defensores con amagues dentro del área y Castromán remató desviado; a los 33m. Palacio volvió a complicar al fondo local, habilitó a Palermo y el goleador definió sólo ante el arquero Medrán, pero el guardavalla ganó el duelo; y sobre los 37m. la ecuación se invirtió, pero se mantuvo el resultado final: Palermo dejó sólo a Palacio, pero el delantero bahiense tampoco pudo superar a Medrán.
Así, el encuentro se hizo de ida y vuelta, pleno de emociones y con un resultado abierto. A los 41m. Galván ejecutó un tiro libre al ángulo derecho y otra vez se lució Caranta, con una volada espectacular para desviar la pelota de su arco y un minuto más tarde, Tonelotto ganó dentro del área y metió un cabezazo que se fue por encima del travesaño. En un gran espectáculo, Boca se fue en ventaja a los vestuarios. San Martín quizás pagó demasiado caro su error del comienzo del partido.
Poco y nada se modificó en el complemento. Los sanjuaninos continuaron dilapidando situaciones y Boca se dedicó a refugiarse con solidez en el fondo y apostó al contragolpe para liquidar el pleito. Paulatinamente, el arquero ‘xeneize’ se fue convirtiendo en la figura de la cancha. A los 6 minutos, Tonelotto estuvo cerca del empate, pero su remate bajo fue desviado por Caranta; a los 12m. Pacheco probó con un fortísimo disparo desde lejos y el arquero respondió con sus puños y a los 18m. Caranta volvió a responder con solvencia ante un cabezazo de Recalde.
Gran verdad de Perogrullo ‘futbolera’: “los goles que no se convierten en un arco, se sufren en el contrario”. A los 23 minutos del complemento, los locales se quedaron con diez jugadores, por expulsión de Alejandro Goméz, luego de una infracción contra Riquelme, y ya no pudieron contener las embestidas de los visitantes: a los 30m. Battaglia remató apenas desviado; a los 31m. Riquelme amagó dentro del área, eludió a dos defensores y definió al palo derecho, pero pudo rechazar Medrán y a los 32m. Palacio cruzó el área de derecha a izquierda y “picó” la pelota por encima del arco. Hasta que apareció Palermo...
A los 34 minutos, el ‘Titán’ tomó el balón en la puerta del área y remató cruzado, de zurda, para sellar el triunfo por 2-0. Y se terminó la historia. Boca manejó hasta el final los hilos de un encuentro que le resultó más complicado de lo previsto, consiguió su segundo triunfo consecutivo en el Clausura y se afirma como candidato al título. (Telam)
