“Hablaron con la gente que se le acercaba, fue muy cordial y amable, estuvo siempre atento. Vino con dos amigos, nadie más. Le ofrecimos salir por la puerta de atrás, pero quiso salir por adelante. Estaba sin custodia”, relató Nadia en diálogo con Todo Noticias, a la vez que agregó: “A Messi se le transformó la cara, pero no hizo nada”.
Nadia continuó su relato y expuso: “La persona que lo agredió estaba encapuchada. Por suerte no pasó a mayores”, dijo, al tiempo que minimizó el episodio: “No pasó nada grave, no hizo falta que venga la policía. Fueron chicos de un colegio”.
Era la primera vez que el crack del Barcelona iba a comer a ese lugar. Luego del mal trago, Messi continuó saludando a la gente y sacándose fotos con quienes buscaban un retrato con el mejor futbolista de la actualidad. (Infobae)