Netanyahu afirmó que "no habrá gobierno de unidad".
"No hay ningún puente que nos una" con el Campo Sionista, la coalición que integran el Partido Laborista y el centrista Hatnuah, subrayó el jefe del Ejecutivo israelí­, a cuyo partido Likud los sondeos otorgan 20 ó 21 bancas, frente a 24 que para Campo Sionista.
"Estamos en una campaña decisiva. Todaví­a hay una diferencia significativa entre el laborismo y el Likud...que viene provocada ante todo por financiación extranjera que ha sido aportada a las organizaciones de izquierda", dijo el premier, informó la agencia de noticias EFE
El presidente de la Comisión Electoral, Salim Yubran, en cambio, no intervino en la denuncia de la diputada árabe Hanee­n Zohabi, que exigió ordenar al Likud retirar un polémico post que el primer ministro habí­a colgado en su página de Facebook.
En otra declaración ácida, Netanyahu alertó que "los votantes árabes están acudiendo en manada a las urnas. Organizaciones de izquierdas los están transportando", y pidió a sus seguidores que acudan a las urnas porque "el Gobierno de la derecha está en peligro".
La diputada laborista Shelly Yachimovich respondió en otro mensaje en el que señala que "ningún lí­der occidental osarí­a hacer semejante comentario racista".
"Imaginaos un primer ministro o presidente en cualquier democracia que advierta de que su Gobierno está en peligro porque, por ejemplo, los votantes negros acuden en masa a las urnas. ¿Es horrendo, verdad?", ejemplificó.
Ahmed Tibi, de la coalición árabe Lista Común, aseguró que Netanyahu estaba en "pánico" por la posibilidad de perder el Gobierno e instó a la minorí­a árabe a "ejercer su derecho al voto como ciudadanos de pleno derecho".
Fuente: Télam
