Por este motivo, se recomienda particularmente que los adultos prohíban terminantemente el uso de pirotecnia por parte de los niños y tomen todos los recaudos para que éstos no estén expuestos a elementos pirotécnicos. Cabe destacar que el mayor porcentaje de heridos graves por esa causa se registra generalmente en chicos de 5 a 14 años de edad.
Es fundamental la responsabilidad de cada persona y de cada familia para prevenir accidentes vinculados a la pirotecnia. A su vez, se recomienda tener especial cuidado al destapar botellas de bebidas espumantes, ya que los denominados "corchazos" pueden ocasionar daños en el rostro, principalmente en los ojos.
Consejos a tener en cuenta
Por un lado, si cae fuego sobre la ropa, se lo debe sofocar envolviendo al afectado con una manta o haciéndolo rodar sobre el suelo. La víctima no debe caminar y menos aún correr. Por otra parte, si se produce una quemadura más leve, se recomienda lavar la zona lesionada con agua fría para calmar el dolor y frenar la acción calórica, así como cubrir esa misma zona con paños limpios, toallas o sábanas. No deben colocarse cremas, pomadas ni ungüentos caseros.
En caso de que se produzcan incidentes con compromiso ocular, no deben tocarse los ojos. En todos los casos se debe asistir inmediatamente al centro de salud más cercano.