La ceremonia se realizó en la prisión de alta seguridad de Belmarsh, en Londres, donde el ladrón, de 72 años, cumple una condena de 30 años por su responsabilidad en el robo de 1963, uno de los hechos policiales más notorios de la historia de Gran Bretaña.
Biggs está parcialmente paralizado y casi incapaz de pronunciar palabras por una serie de ataques cardíacos que lo dejaron hemipléjico.
Su novia, Raimunda Rothen, de 54 años, estaba "extremadamente preocupada" por la salud de su esposo, uno de los delincuentes más célebres del mundo.
La precaria salud de Biggs, quien está en peligro de muerte, hizo que Raimunda aceptara casarse luego de la cuarta propuesta matrimonial que le hizo él.(Télam-SNI)