El dato no deja de llamar la atención, ya que en caso de ser real, significaría que el objeto robado ya estaría perdido debajo de toneladas de basura, en la planta de tratamiento de residuos, en El Pantanillo, y en ese caso las autoridades de la Justicia Federal consideraron que sería como “buscar una aguja en un pajar”.
Además Jasani nunca explicó porqué decidió cometer el hecho, y ayer se limitó a contar lo que supuestamente hizo en la tarde del 22 de enero pasado.
El juez federal Ricardo Moreno ordenó someterlo a pericias psiquiátricas, para determinar sus condiciones mentales.
Además pidió un informe al director de Higiene Urbana, respecto a cómo funciona el sistema de recolección de residuos, y principalmente para saber si es posible encontrar el objeto después de casi dos semanas.
Las expectativas son muy pocas, ya que si bien el funcionario municipal no ha respondido todavía, de alguna manera anticipó que, a 13 días del robo, un objeto de ese tamaño debería estar debajo de una gran cantidad de basura y tierra.