Ayer a primera hora, José Luis Rivas Russo fue encontrado por un amigo que fue a buscarlo a su casa, en el pasaje Virgen de Belén, entre Sarmiento y Lavalle.
El fiscal Walter Falcone ordenó que el cuerpo sea llevado al hospital, y pidió una comisión de peritos de esta Capital para realizarle la autopsia.
Mientras tanto se revisó la habitación, que estaba totalmente cerrada, y en su interior se percibía olor a monóxido de carbono.
Al lado de la cama había un brasero del que aún se veía salir humo, pero lo que llamaba la atención que el joven tenía cortes en las muñecas y antebrazos, de los cuales había perdido sangre que derramó en la almohada y en las sábanas. Además presentaba una hemorragia nasal.
Anoche, después de varias horas de incógnita, se determinó que se trató de un nuevo caso de suicidio.
Según fuentes policiales, en una revisión mas detenida de la casa, se encontró una carta del joven dentro del auto, además de un cuchillo con el que se habría provocado las heridas en los brazos.
Además se determinó que Rivas Russo no solo se había encerrado con el brasero encendido, sino que además había dejado abierto el paso del gas en el calefón.
El joven era oriundo del departamento Valle Viejo, y se encontraba residiendo en Belén por razones laborales.