Los ladrones despertaron a las víctimas, las maniataron y las llevaron al baño, donde las dejaron encerradas.
Durante unos 40 minutos, con total impunidad, los sujetos se dedicaron a revisar la casa en busca de dinero y elementos de valor, pero al parecer no encontraron todo lo que buscaban.
Según el damnificado, los asaltantes se apoderaron de una notebook, una cámara de fotos, reproductores de MP3 y algunos teléfonos celulares, además de la suma de $ 100.
Recién a las 6 de la mañana, cuando Carrizo Barrera y su familia lograron safar, pudieron avisar a la policía.