Lo extraño del caso es que quienes realizaban estas tareas, habituales en toda campaña preelectoral, no habían protagonizado incidentes de ninguna clase, por lo cual no quedaron claros los motivos de la intervención policial; aunque extraoficialmente se señaló luego que los unformados actuaron porque consideraron que era inseguro que varias personas viajaran en la caja de la camioneta.
Los militantes fueron trasaladados a la Dirección de Investigaciones, donde también quedó momentáneamente secuestrado el vehículo.
Apenas trascendió el suceso, abogados y candidatos del Frente Justicialista Para la Victoria se presentaron en la citada dependencia de la policía provincial para exigir la inmediata liberación de los militantes, al tiempo que denunciaron como “arbitraria e injustificada” la maniobra policial, y expresaron su total repudio a lo que calificaron como un claro acto de “persecusión política impropio de los tiempos democráticos”, donde la Constitución provincial prohíbe castigar a un ciudadano por expresar sus preferencias o ideologías políticas.