Alrededor de las 4 de la madrugada, efectivos de la comisaría Segunda recorrían avenida Hipólito Irigoyen, cuando encontraron a dos menores que les pidieron auxilio, ya que eran seguidos por un sujeto que pretendía robarles el teléfono celular.
Los menores indicaron que cerca del barrio Virgen Niña fueron interceptados por Rosales, quien les exigió que le entreguen un teléfono celular.
Pero los menores salieron corriendo en busca de ayuda, y fueron perseguidos por varias cuadras por el sujeto, que con un cinto en la mano los amenazó.
Cuando vieron el patrullero, los jóvenes corrieron para alertar a los efectivos, quienes interceptaron al “Payo”, quien se encontraba bajo los efectos de alguna sustancia extraña.
Rosales forcejeó con los policías hasta que lograron reducirlo, y trasladaron al puntero barrial hasta la comisaría, donde ingresó en primer término como arrestado en averiguación de actividades, pero luego los padres de los menores realizaron la denuncia en la Unidad Judicial Nº 2, y el fiscal en turno dispuso que Rosales quede detenido, por los delitos de robo en grado de tentantiva y resistencia a la autoridad.
La semana pasada, el juez de garantías José Carma, había dispuesto la libertad del acusado, al rechazar el pedido de prisión preventiva que el mismo fiscal Dalla Lasta había planteado.
A fines de julio, el “Payo” había tomado de rehenes a su esposa y a otras dos mujeres, en un local de Hipólito Irigoyen al 2100.