El jueves al mediodía dos hermanas (Yesica 14 años y Fernanda 15 años nombres ficticios) y a su vez compañeras de curso en la Escuela de Comercio de esta Capital, aprovecharon que salieron antes del horario habitual y decidieron compartir unos sandwichs con sus amigos antes de regresar a sus hogares.
La menor de ellas decidió ir a buscar a uno de sus tíos, que trabaja en el barrio El Palomar, para pedirle dinero para comprar una gaseosa. Cuando transitaba por la parte posterior del establecimiento, comenzó a ser llamada por otra alumna de la misma escuela, la cual se encontraba en compañía de al menos otras 6 jovencitas, según relató la misma a Diario Panorama.
“Me empezó a decir por que hablaba de ella, mientras me ponía el dedo en los labios y me empujaba la cabeza para atrás” relataba Yesica.
“Yo le dije, como puedo hablar de vos si no te conozco, es la primera vez que te veo. Y trataba de alejarme, pero ella me seguía. Como me seguía empujando con la mano, le dije que a mi no me haga eso y ahí fue que me pegó una trompada en la boca” mientras mostraba el hematoma que le quedó en el labio y también las marcas de uñas en el antebrazo derecho.
Luego del golpe en la cara Yesica cayó al piso y mientras trataba de levantarse, un adolescente “alto y delgado, que estaba con la que me pegaba vino y me pateó en la espalda. Caí de nuevo y en el piso me volvió a patear, esta vez en el pecho” cuenta Yesica al borde de las lágrimas, recordando el momento terrible que pasó.
Allí fue que intervino Fernanda, al ver como su hermana era golpeada, pero también cayó bajo los golpes del grupo agresor. Ella sufrió hematomas en el rostro, como así también un pequeño derrame en el ojo izquierdo. El ataque duró algunos minutos, el cual habría sido grabado por los celulares de otros alumnos, quienes a su vez alentaban a los atacantes a seguir con la paliza.
Como pudieron y también con la ayuda de algunos compañeros, las hermanas lograron escaparse y de inmediato se dirigieron al hospital Regional. Allí fueron atendidas por las lesiones sufridas.
8 días de reposo
Miguel, el papá de las jovencitas, contaba a Diario Panorama que al llegar a su casa se encontró con sus hijas golpeadas, por lo cual concurrió a la Seccional Tercera a los fines de radicar una denuncia y posteriormente traladar a sus hijas hasta la base de Sanidad Policial, donde el médico habría revisado a las adolescentes y extendiendo una constancia por 8 días, para que las mismas logren reponerse de las lesiones sufridas.
Agregó que con estas constancias se dirigió a la Dirección de la escuela y puso en conocimiento de las autoridades el hecho de violencia, además de solicitar sanciones hacia los alumnos agresores.
Ahora las jovencitas deberás esperar dos cosas: la recuperación de sus lesiones y que los agresores sean identificados y sancionados.
Fuente: elliberal.com.ar