Los efectivos intentaron inmovilizar al desconocido, quien evitó el cerco policial y emprendió una veloz carrera, oportunidad en la que ingresó en una vivienda. A partir de entonces, se originó una intensa persecución, especialmente porque el individuo comenzó a saltar las tapias de numerosas casas de la zona con intención de evitar su aprehensión. La fuga se hacía en forma constante, generando la total sorpresa de sus moradores, que a los gritos denunciaban la presencia del sujeto a los policías. Fue así que el acusado corrió por el interior de una manzana completa. Por tal motivo, se solicitaron refuerzos y, a los pocos momentos arribaron más efectivos del Departamento de Investigaciones, con otras unidades policiales de apoyo. Trascendió que en esa alocada carrera, no faltó el vecino que pretendió agredir al ladrón con un palo de escoba al advertir su presencia en la propiedad. Otras mujeres salían a los gritos a la vereda para llamar a la policía, generándose una verdadera conmoción hasta que el desconocido fue acorralado en la galería de uno de los domicilios, oportunidad en que se hizo cortes con un trozo de vidrio y también se hirió en el cuerpo y en la cabeza con los restos de una bombilla que llevaba entre sus prendas de vestir.
Fuente/ elliberal.com.ar