En declaraciones televisivas Cabrera expresó que su marido y su hijo estuvieron el miércoles pasado en la vivienda situada en la calle Kiernan al 900, de Villa Tesei, para retirar algunas pertenencias de su madre, fallecida hace un año.
"Fueron a buscar cosas de mi madre, por eso quedaron pegados", dijo la mujer.
Por su parte, comentó que su familia, "como todo el mundo", estaba al tanto de la desaparición y posterior asesinato de Candela.
Además, aseveró que no conocía a los padres de la niña, aunque la casa de su madre, en donde se habría hallado rastros genéticos pertenecientes a la víctima, estaba muy cerca de la vivienda de los Rodríguez.
Según indicaron fuentes judiciales, un vaso que se encontró en la casa de la calle Kiernan determinó que poseería las huellas de la niña, y estarían mezcladas con las de otra persona que se buscaba identificar.
Fuente: 26noticias.com.ar