En la caja del patrullero iban tres suboficiales, que fueron blanco fácil de las piedras, y que sufrieron lesiones de consideración.
Entonces pidieron refuerzos, ya que el móvil resultó con rotura de la luneta, a pesar de está cubierto con enrejado metálico.
Otros cuatro móviles llegaron al lugar y rodearon el sector para detener a otros dos individuos, parientes directos de Velazquez.
Los tres policías heridos fueron llevados a distintos centros asistenciales, y según se informó, dos sufrieron lesiones de consideración.