El hecho, que en un principio se creyó que era un suicidio, dio un sorprendente giro cuando el fiscal ordenó la detención del padre del adolescente, porque fue el único que se encontraba en la casa cuando sucedió la tragedia.
El 28 de abril pasado, en horas de la noche, Carrizo padre e hijo discutieron en su casa de la localidad de Dos Pocitos, departamento Santa Rosa.
Según el fiscal, el padre le aplicó un puñetazo en el rostro a su hijo, y luego le disparó con una escopeta, a una distancia de por lo menos un metro, con lo que le provocó la muerte en el acto.
Varios testimonios y la pericia balística, fueron las pruebas fundamentales en que se basó el fiscal para atribuirle la autoría del hecho al padre.
Hasta el día de hoy, Carrizo nunca declaró sobre el hecho de sangre, por lo que se espera que esta tarde, con la asistencia del abogado Víctor Pinto, el acusado de su versión.
Auque no trascendió cuál será, se adelantó que tratará de desvincularse de la responsabilidad en el homicidio.