Los inmigrantes se movilizaban en un colectivo por la provincia de Entre Ríos cuando fueron detenidos por Gendarmería Nacional. Al detectar que carecían de la documentación que acreditase su identidad o ingreso al país, los oficiales de la fuerza resolvieron demorarlos. Luego se comprobó que ninguno de los cuatro contaba con antecedentes penales o de irregularidades migratorias.
El tribunal advirtió que toda persona que se encuentre en la misma situación que estos jóvenes "no es un extranjero ilegal", debido a que la condición de legalidad se refiere a actos y nunca a personas. "Ningún ser humano es ilegal", reafirma el fallo.
La Cámara remarcó, además, que, mientras no exista una orden firme de expulsión, no hay ninguna necesidad de retener a los ciudadanos, debido a que la medida se convertiría en una pena.
El fallo de la Cámara Federal de Paraná señala que ha habido en el país un cambio en la política migratoria a partir de la ley 25.871 y se estableció el "derecho a migrar" como un derecho humano. A partir de este nuevo paradigma, se tiende a buscar la regularización del migrante y no su castigo. (Infobae)