El paciente tiene 22 años (este diario se reserva su identidad) y reside en el barrio Juramento, en la zona sur de la ciudad capital.
Su historia, sin querer, relegó a un plano secundario lo abultado de los antecedentes penales que figuran en su planilla, al padecer el 0,1% y 0,2% de todos los cánceres de varón, con una anual en unos 0,7 casos por cada 100.000 hombres, revelaron los voceros.
Según confirmó la jueza del Crimen de Quinta Nominación, Rosa Falco, mientras el joven transcurría su detención -primero en la sede de la Seccional Cuarta y luego en la unidad penitenciaria de Alsina 850- comenzó a experimentar un notable debilitamiento y cansancio general.
Rápidos, los guardias lo condujeron al Hospital Regional y en pocas semanas los médicos le confirmaron la grave enfermedad que ahora lo obligará a un inmediato tratamiento oncológico en el Hospital Regional Ramón Carrillo.
Adicto a las pastillas y a la marihuana, y de amigos proclives a protagonizar hechos delictivos como práctica de vida, hasta ayer el interno se encontraba alojado en un sector especial de la cárcel provincial, por disposición médica y a la espera de una definición judicial por escrito.
Luego de que su defensa planteara un pedido de libertad, en la víspera Falco hizo lugar a la falta de mérito y ordenó a las autoridades carcelarias la excarcelación del sujeto.
Una vez hecha efectiva la misma, el paciente debería internarse en el Regional y ponerse a disposición de expertos oncólogos que siguen de cerca el tratamiento.
El gran dilema de los funcionarios judiciales es el futuro del enfermo, ya que más allá de su detención, las rejas lo forzaban a seguir un tratamiento médico, capaz de atenuar lo grave de un cuadro cancerígeno.
Ya libre, ni jueza, ni médicos, pueden garantizar que el paciente continué plegado a las drogas medicinales recetadas días atrás, hecho que su abogada reconoció ayer, al tiempo de comprometer su total ayuda para mantenerlo cerca de los profesionales y lejos del delito.
Por otra parte, los médicos indicaron que pocos varones sospechan que pueda tratarse de un cáncer de mama, ya que esta enfermedad siempre estuvo ligada a las mujeres.
Cuando se diagnostica, el tumor suele estar más avanzado que en las mujeres, ya que el varón tiene menos cantidad de grasa y tejido conjuntivo, por lo que el tumor tarda menos tiempo en diseminarse hacia ganglios y torrente sanguíneo, afirmaron las fuentes consultadas.
Fuente: elliberal.com.ar