Lo que en un principio fue investigado como un posible secuestro extorsivo de oficio por la policía, ya que no se había registrado ninguna denuncia formal, terminó generando demasiadas dudas a los pesquisas.
"Es un hecho delictivo atípico, no tuvo el ordenamiento de costumbre y el manejo fue bastante extraño", dijo a Télam uno de los investigadores que siguió paso a paso el caso. (Télam).-