Miguel Neiff, dueño del comercio, manifestó a LA GACETA que los uniformados ingresaron sin una orden judicial e intentaron sacarlo del local por la fuerza. "Los inspectores vinieron a hacerme una clasura, pero vivieron con 10 o 12 policías con escudos y escopetas. Trajeros todo ese procedimiento para tratarme de sacar. Pero yo nunca salí", indicó el comerciante, que afirma que tiene todo filmado.
En tanto, el comisario Mario Rojas, segundo jefe de la Unidad Regional Norte, negó que los efectivos policiales hayan ingresado al comercio. Además aserveró que participaron de la clausura sólo para acompañar el procedimiento de los inspectores, que ya clausuraron el local en reiteradas oportunidades.
Una ordenanza de hace varios años, que se ha reglamentado hace poco, prohibe la modificación de una vivienda de uso habitacional de Lomas de Tafí, ya sea por ampliación o para uso comercial, y prevé severas multas a los propietarios.
Neiff, de 32 años, acusó a las autoridades de la Municipalidad de Tafí Viejo por lo sucedido. "Están obrando mal. Aquí hay un problema político. Todos los comerciantes tienen inconvenientes con la Municipalidad", se quejó. Criticó además que, ante la prohibición de la apertura de comercios particulares en el barrio, los vecinos deban viajar varios kilómetros para hacer sus compras. "Esta noche nos reuniremos todos los comerciantes", afirmó.
Buscando obtener mayores precisiones sobre lo ocurrido esta mañana, LA GACETA se comunicó con Carmen Serpa, secretaria de Obras Públicas de Tafí Viejo, quien indicó que "de los temas de Lomas de Tafí se encarga Pucharras". El teléfono del intendente de taficeño, sin embargo, se encontraba fuera de servicio. LA GACETA ©