Acuña había sido destituido en febrero del año 2.001 a través de un juicio político en el que el por entonces fiscal Jorge Silva Molina no mantuvo la acusación en contra de Acuña. Este fue el principal argumento utilizado por el abogado para recurrir ante la Suprema Corte de la Nación que en definitiva resolvió en su favor.
Ramón Porfirio Acuña también demandó al Poder Judicial por haber dejado de pagar su sueldo como magistrado durante más de siete años. Por este motivo se creía que el juez juraría por algunas horas para luego renunciar y dar tope a la deuda de la justicia con él. Sin embargo, tras el acto realizado en la Corte, Acuña negó esta posibilidad asegurando que continuará trabajando en su nuevo cargo.
un millonario mas
Por: Tatu el 06-04-2009 a las 19:15