Pasado el medio día, a las 13:40, una mujer de apellido Páez, recibió un llamado mediante el cual le manifestaban que su hermano habría sido secuestrado, y le solicitaban la recarga de crédito a diferentes números telefónicos.
Más tarde, a las 14:45, una familia de apellido Córdoba, recibió llamadas telefónicas informando que un familiar, fue secuestrado y que para su liberación debían recargar saldo a diferentes números de teléfono, con un monto indicado.
En todos los casos, los efectivos policiales pudieron constatar mediante una previa investigación, que las personas supuestamente secuestradas, se encontraban en sus hogares y lugares de trabajo, en buen estado de salud, siendo falsa la información recibida mediante los llamados, y sin dar cumplimiento a lo exigido. Así mismo, los damnificados efectuaron las denuncias correspondientes.
Teniendo en cuenta las metodologías empleadas en estos casos, se recomienda a la población en general, que en caso de recibir algún llamado de estas características se de pronto aviso al Comando Radioeléctrico o a la Comisaría más cercana.