Se trata del obispo de Aysén, Luis Infanti de la Mora, quien a raíz de los crímenes de doce jóvenes de entre 15 y 26 años, salió públicamente a denunciar a la banda delictiva, la cual se cree tiene vínculos "judiciales, policiales y militares" chilenos.
El obispo denunció también que unos 150 kilos de droga llegan por mes a la ciudad de Comodoro Rivadavia a través de esa red. (Télam)