"Argentina se está beneficiando automáticamente con la emisión de un tipo de moneda que va directamente a las reservas de los países. En nuestro caso, la cifra es cercana a los 3.000 millones de dólares", dijo Taiana, al regresar al país tras haber acompañado a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner a Qatar y Londres.
Producto de las deliberaciones, el G-20 decidió duplicar el capital del Fondo Monetario Internacional, a 500.000 millones, y luego a 750.000 millones. Argentina tiene casi el 1,0 por ciento del capital social del organismo. Por eso, esta ampliación del capital del FMI, expresado en los Derechos Especiales de Giro (DEG), "se traduce en un directo aumento de las reservas argentinas", destacó Taiana.
En la reunión del G-20 "hubo un reconocimiento de que la crisis mundial requiere cambios en la estructura del sistema económico y financiero internacional", y "esos cambios no pueden ser sólo cosméticos, algo que Argentina venía sosteniendo hace tiempo", dijo el canciller a su regreso de Londres.
En lo que respecta a la economía real, Taiana consideró que "las medidas del G-20 van a fortalecer en lo inmediato nuestras reservas; y, en cuanto se controle más el sistema financiero internacional, vamos a estar menos expuestos a los vaivenes de los flujos del capital; vamos a tener más oportunidades de apoyar las exportaciones, y razonablemente vamos a tener más acceso al crédito para el desarrollo de infraestructura".
El canciller afirmó que "hemos obtenido un mayor fondeo para las políticas que tienen que ver con el desarrollo y con la infraestructura de los bancos de desarrollo, específicamente del Banco Mundial y del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), que pertenece a nuestra región".
"Eso no lo teníamos hasta hace diez días. Se ha conseguido una línea de crédito importante de hasta 250.000 millones de dólares, que comienza con 50.000 millones para el Banco Mundial, destinados a favorecer exportaciones, básicamente accesibles a países en desarrollo", agregó el canciller. (Telam)