La futura ley de telecomunicaciones, para los proveedores de servicios y soluciones tecnológicas es una "oportunidad de negocios", ya que sus clientes, especialmente los proveedores de internet (ISPs) tendrán que incorporar más inteligencia a sus redes.
Justamente por tratarse de un impulso de negocios generado por "temas regulatorios", dijo Biglia, "no será un crecimiento orgánico", pero aclaró que "la región" también "acompaña" el optimismo de cara a los próximos dos años.
Para Biglia un factor diferencial respecto de otros países es "la adopción de mercado argentino de los nuevos conceptos", como por ejemplo el internet de las cosas que se traduce en soluciones concretas para segmentos como el petrolero.
De hecho la emrpesa está trabjando fuertemente en Neuquén,y su director comercial,Leandro Maure, señaló que "llevamos a los ingenieros a que conozcan como se trabaja en un pozo de petróleo, para que puedan entender el negocio y generar las soluciones que necesita".
También desde Alcatel Lucent, marcaron que los próximos dos años los operadores requerirán de inversiones para desplegar las redes de LTE (o cuarta generación de móviles).
Su presidente, Fernando Iván Sosa, dijo a Télam que los plazos de desepliegue de infraestructura previsto sen la licitación son "desafiantes" para cuarta generación y "alcanzable" en cuanto a tercera generación.
La subasta realizada el 31 de octubre pasado, incluyó bloques de frecuencias de tercera generación para el nuevo jugador en el mercado, AirLink, y para dos de los operadores actuales de 3G (Claro y Personal).
De cara al mercado, los proveedores coinciden en que hay un "cuello de botella" por la "escacez de profesionales necesarios", y que en primera instancia los operadores de telecomunicaciones haran foco en las inversiones en el "core" o los equipos que constituyen el "corazón y cerebor" de la red, para luego desplegar la red.
Fuente: Télam