“Una instancia donde se pueda llegar a acuerdos y no que sea una muestra de las posturas extremas, que tienen un rotundo no o un rotundo sí a la minería”, apuntó el legislador.
Consideró necesario buscar en la doctrina social de la Iglesia lo que debe significar la minería para una comunidad, “es decir, la producción que beneficie no solo a las empresas sino de manera especial a las comunidades donde están los yacimientos”. Afirmó que si las comunidades sintieran de manera contundente los beneficios económicos de la producción minera hoy no habría planteos ambientalistas.
Finalmente dijo desconocer el motivo por lo que no participan los representantes de la Secretaría de Minería de la Provincia.