Ayer, Boudou se reunió en Milán con directivos del Credit Suisse, de la Banca Nazionale del Lavoro, que tienen en su cartera de clientes a tenedores de bonos en default.
El lunes, en Roma, la agenda de encuentros también abarcó a legisladores locales.
La delegación argentina estuvo compuesta además por el secretario de Finanzas, Hernán Lorenzino; de Política Económica, Roberto Feletti; y el subsecretario de Financiamiento, Adrián Cosentino.
Cosentino seguirá adelante con el `road show` internacional que tiene como próximos destinos las ciudades de Tokio, Ginebra y Frankfurt, con el objetivo de sumar la mayor cantidad posible de tenedores minoristas al canje de deuda.
Una fuente de la delegación argentina manifestó a Télam su "optimismo" con el nivel de recepción que tuvo la propuesta de canje en Italia y resaltó las "perspectivas positivas" que se abrieron durante los últimos días respecto al nivel de adhesión final que existiría de parte de los tenedores minoristas.
El interés de las autoridades argentinas puesto en Italia se sustenta en que los bonistas locales tendrían en su poder títulos en default por entre 2.000 y 4.000 millones de dólares.
Boudou, durante una conferencia de prensa brindada durante la víspera en Roma, argumentó que "nuestra presencia por segunda vez en Italia en este proceso intenta demostar la importancia que da el gobierno de la República Argentina a solucionar este conflicto, en un momento de mucha dificultad internacional, poniendo dinero cash para cumplir con los intereses y cambiando a la par los bonos de los tenedores individuales".
"Argentina tiene mucho afecto por Italia, acá hay cuestiones hasta familiares. La Presidenta (Cristina Fernández de Kirchner) hizo mucho esfuerzo en diseñar la mejor oferta posible, que Argentina pueda cumplir y nosotros esperamos que los inversores pequeños hagan un esfuerzo y entren a esta oferta", remarcó el ministro.
Uno de los principales diarios especializados locales, "Il Sole 24 Ore", reflejó en la tapa de su suplemento de finanzas y mercados la visita de Boudou a Roma en el marco del plan de rescate de los "Tango bond" en default.
Con el título de "ahora los bancos buscan facilitar la adhesión", el diario italiano recalca que el 7 de junio próximo cierra la operación..
La nota también señala que los bancos locales, que colocaron los bonos a tenedores minoristas antes del default, acordaron con la Task Force Argentina, la entidad que lidera Nicolás Stock, la posiblidad de que los ahorristas afectados desistan a través de un trámite rápido del mandato que otorgaron en su momento para iniciar un proceso de arbitraje ante el tribunal internacional del CIADI.
El renunciamiento a todo tipo de acción legal es la condición puesta por Argentina para que los tenedores de bonos en default puedan ingresar al canje.
Stock, que en 2005 se opuso al canje de deuda, ahora dejó en libertad de acción a los 180.000 tenedores que representa para que ellos definan si quieren ingresar o no a la operación.
Lorenzino, en la rueda de prensa que compartió durante la víspera con Boudou, hizo foco en este entendimiento y les recordó a los bonistas italianos "el tribunal del CIADI todavía no ha tomado, y es probable que a lo largo de este año no tome una decisón respecto de si es una jurisdicción competente para realizar un proceso de revisión del asunto".
En la misma sintonía, el ministro recordó que "los pequeños ahorristas llevan 10 años sin percibir un solo centavo", para luego subrayar que el Gobierno presentó "una oferta que creemos que es aceptable para los pequeños ahorristas y para la Argentina, y esperamos que los inversores pequeños hagan un esfuerzo y entren" a la operación.
Fuente: Infobae