Según cálculos del Banco Central brasileño, hasta diciembre del 2002 el sector privado tendrá que enviar al exterior 13.468 millones de dólares para el pago de deudas, 8.493 en concepto de capital y 4.975 en intereses.
El gobierno de Fernando Henrique Cardoso está preocupado porque en los últimos meses, junto con las turbulencias de los mercados locales y el aumento del dólar y el riesgo país, las empresas han tenido dificultades en reprogramar sus deudas en el exterior. ( Télam-SNI)