“Aún no hay certezas sobre las medidas que tomará el nuevo gobierno, y en este contexto haber logrado esta aprobación es muy importante para la provincia, ya que la vigencia del PRO.CRE.CAT finalizaba a fines de año”, sostuvo Álvarez.
El PRO.CRE.CAT tuvo un fuerte impacto económico y social, tanto en el valle central como en el interior de la provincia, donde el grueso de las operaciones se concretró en Santa María, El Alto, Andalgalá, Belén, Fray Mamerto Esquiú y Tinogasta.
Álvarez consideró que “el total de 30 millones de pesos otorgados para créditos hipotecarios produce un efecto multiplicador para la economía local, como efecto derrame en el sector de la construcción”.
El PRO.CRE.CAT abarca tres modalidades: Construcción; Ampliación y refacción; y una Línea Especial a sola firma, destinada exclusivamente para ampliación, refacción y terminación de inmuebles para la vivienda propia, única, familiar y de ocupación permanente.
El monto máximo de financiamiento es de $500.000 para la construcción y hasta $450.000 para ampliación y refacción. En tanto que, debido al éxito y a la fuerte demanda, se amplió a $100.000 el monto de la Línea Especial a sola firma destinada exclusivamente para ampliación, refacción y terminación de viviendas.