El titular del Palacio de Hacienda dijo estar "sorprendido por el comunicado" enviado vía email por Daniel Pollack, el cual afirmó, "parece escrito para favorecer a una de las partes".
El ministro realizó estas declaraciones al brindar una conferencia de prensa con medios nacionales e internacionales en el Consulado argentino en Nueva York, luego de concluir un encuentro hoy de casi cinco horas con Pollack y los fondos buitre.
Por su parte, el mediador asignado por el juez neoyorquino, Thomas Griesa, para intervenir en las negociaciones entre Argentina y los fondos buitre, lamentó que "no hubo acuerdo" entre las partes y declaró que por consiguiente "Argentina estará inminentemente en default".
"Este caso ha estado altamente publicitado y politizado por varias semanas. Lo que ha estado perfectamente claro para mí todo el tiempo", dijo, "es que las leyes de los Estados Unidos deben ser obedecidas por todas las partes".
El abogado de Manhattan especialista en litigios financieros que intervino en el caso durante las últimas cinco semanas en su función de mediador, detalló lo que para él implica la declaración de un default y sus "consecuencias ciertamente no positivas".
Luego explicó las decisiones de los tribunales norteamericanos, los cuales decían que Argentina no podía realizar pagos de intereses a los tenedores de bonos que ingresaron a los canjes de 2005 y 2010, "salvo que simultáneamente realice los pagos debidos a los holdouts".
Esta situación fue descartada por Kicillof en el encuentro con los medios, al aseverar que "no se puede" acceder al reclamo de los fondos buitre de pagarle más que al resto de los bonistas reestructurados.
"Eso no se puede porque la República Argentina está sometida a sus propias leyes y a los contratos firmados con los bonistas de 2005 y 2010. No podemos hacer ofertas superiores", aseguró el ministro.
Por tanto, dijo el funcionario, la oferta que se les hizo a los fondos buitre fue la de que ingresaran al canje "en similares condiciones" de la que obtuvieron los tenedores de bonos reestructurados, lo que les proporcionaría "300 por ciento de ganancias".
Por último, Pollack mencionó en su comunicado que "no es su rol ni intento encontrar culpas de cualquiera de las partes" y dijo que seguirá "estando disponible a las partes para ayudarlos a encontrar una resolución que ellos deben alcanzar por el interés de todos los interesados".
Fuente: Télam