De esta forma, los matarifes de otras provincias podrán utilizar el matadero municipal con este fin. Según se adelantó, se determinará una política de precios que le permita competir con los del sector privado.
El matadero municipal había sido inhabilitado para esta tarea a fines del año pasado por el Servicio Nacional de Sanidad Animal (SENASA), con lo que sólo podían trabajar productores de la provincia.
Los trabajos de reparación se hicieron sobre mampostería, pisos de playa y cámara, túnel de sangrado, sector de noqueo, baños, vestuarios y sala de oreo. También se acondicionaron los equipos de frío y de control de agua, la caldera y cámaras decantadoras, según informaron autoridades municipales.