Pero pasadas las horas el portavoz del CATP, Victor Sardina, afirmó que "la primera ola tras el fuerte movimiento fue de solo 30 centímetros, una altura menor de la esperada". Por ahora no hay informaciones de daños materiales ni víctimas.
"Creemos que seguirán más olas y eso podría durar horas", dijo Sardina a Dpa. La población de las islas había sido alertada por las sirenas a lo largo de dos horas y decenas de miles de personas de las poblaciones costeras se marcharon a las zonas más altas en la búsqueda de un lugar seguro.
El temor a un desastre provocó también un caos circulatorio en la capital de Hawai, Honolulu.
Precisamente su alcalde, Peter Carlisle, dijo a Europa Press que "por ahora se mantendrá la alerta de tsunami a pesar de la baja intensidad del oleaje" desatado por el sismo.
Carlisle estimó que la situación "todavía no es segura" e insistió a los residentes que "sigan atendiendo las medidas de seguridad recomendadas por las autoridades".
Fuente: Télam