Los abogados de la querella son Federico Egea y Blanca López, en tanto que la defensa de los acusados está a cargo de Marcela Herjo, Stefanía Sauli y Javier Cardellino.
Según las fuentes, hay unos 50 testigos citados para que declaren sobre las lesiones que sufrieron los detenidos en el penal.
Gladis Rodríguez, dirigente de la agrupación de Derechos Humanos "Zainuco", informó a Télam que la entidad será querellante en la causa junto a la Asamblea por los Derechos Humanos de Neuquén.
"Las dos organizaciones fueron aceptadas y esta es la única causa en el orden nacional donde los policías serán juzgados por el delito de torturas contra los internos de la cárcel", aseguró.
Rodríguez indicó que "también actuará en su calidad de "Amicus Cureae" (amigos del tribunal o de la causa), el Comité contra la Tortura en la Comisión por la Memoria de la provincia de Buenos Aires, que integran el Premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel y el ex fiscal federal Hugo Cañón".
Los hechos que se ventilarán en el debate, cuyo inicio se postergó en varias oportunidades, ocurrieron entre el 23 el 27 de abril de 2004, en la Unidad 11 del Servicio Penitenciario de Neuquén, ubicada en la capital provincial.
"Las torturas a 50 internos de la cárcel se extendieron por cuatro días en distintos turnos de requisa, por eso es que hay 27 policías procesados y que van a juicio", dijo la dirigente.
Agregó que "las torturas fueron con golpes de puño, puntapiés, varillas de hierro y con los bastones reglamentarios en la planta de los pies, para lo cual los obligaban a sacarse el calzado".
"Los internos eran tirados al piso y en esa posición les pisaban las manos y otras partes del cuerpo, los obligaban a cantar el himno y al que se equivocaba le daban golpes con mucha violencia", relató, y señaló además que "en medio de todo lo que les hacían los obligaban a adoptar posiciones francamente humillantes".
Recordó que todos los policías procesados están en libertad y siguen cumpliendo funciones en la fuerza, e incluso dos de ellos permanecen prestando servicios en la misma U-11 de Neuquén.
En tanto, el abogado querellante Federico Egea indicó a Télam que, en caso de ser hallados culpables de delito de torturas, los acusados podrían recibir penas de entre 8 y 25 años de prisión.
Precisó que "el juez de primera instancia Cristian Piana procesó a los 27 policías por el delito de torturas pero sin dictar la prisión preventiva" y que el mismo magistrado "también rechazó un pedido que presentó para que sean suspendidos en sus funciones".
Fuente/ 26noticias.com.ar