El jefe de Gobierno porteño, Aníbal Ibarra, presente en el lanzamiento del plan de desmantelamiento, aseguró a Télam que "nos hemos impuesto un plazo de cinco meses para terminar con esta tarea, con la que vamos a liberar unas 10 hectáreas para dedicarlas a áreas verdes y proyectos urbanísticos".
"Ya las hemos cercado con alambre y comenzamos las tareas de desratización, para prevenir molestias a los vecinos y asegurar que los predios no sean ocupados y tengan un destino que mejore la urbanización del barrio", afirmó Ibarra. (Télam)