Tomó estado parlamentario en la Segunda Sesión Ordinaria del Concejo Deliberante capitalino, y también a través de la misma se solicita que se impriman doscientos (200) ejemplares de los llamados "Sermones Patrióticos" del Fraile, para su distribución en escuelas y bibliotecas públicas municipales, como asimismo en entidades vecinales de la Ciudad.
"Al franciscano Mamerto Esquiú debemos los argentinos el más bello alegato a favor de la supremacía de la ley como instrumento de pacificación nacional", argumenta Hernández en los fundamentos, y afirma que "la prédica de Esquiú, concebida en circunstancias históricas diferentes pero no menos preocupantes en lo que al ejercicio de la ciudadanía se refiere, tiene en la actualidad una enorme vigencia como valor de enlace entre el apego a las normas y el goce de los derechos".
Es loable recordar que Fray Mamerto Esquiú nación en la localidad de Piedra Blanca, provincia de Catamarca, el 11 de mayo de 1826. Sus padres, Doña María de las Nieves Medina y Don Santiago Esquiú, le confirieron el bautismo el 19 del mismo mes dado que el niño había nacido delicado de salud. Se le impuso el nombre de Mamerto de la Ascensión en homenaje a San Mamerto, en cuya festividad había nacido; y el misterio de la ascensión del Señor, que ese año había caído el mismo día.