El lunes comenzó su segunda declaración, y acusó a un joven que aseguró haber tirado pirotecnia la noche del incendio de haber "quemado" el boliche, por lo que el tribunal que realiza el juicio oral por el incendio ordenó que sea investigado.
Por otra parte, el imputado sostuvo que el local bailable no tendría que haber estado habilitado porque tenía conexiones con el hotel lindante y que no colocó la "media sombra" que causó el siniestro, sino que estaba desde 1997, cuando allí funcionaba una bailanta.
Al declarar por segunda vez por el incendio que provocó 194 muertos, el imputado adelantó que su relato iba a ser "muy arduo y cansador" y basó toda su exposición en una nota publicada el jueves en la revista Gente, en la que un joven dice que teme haber provocado el incendio porque esa noche tiró candelas.
Chabán afirmó que uno de sus abogados ya identificó que se trata de Julio Roberto Vittone (31), quien a su entender podría ser quien junto a otros dos chicos salió debajo de las escaleras y tiraron las candelas en una "acción descomunal".
"Yo no puedo creer que esta persona que quemó el lugar y tiró candelas al techo esté cobrando un subsidio de la Municipalidad y me esté haciendo un juicio a mí", remarcó y dijo que una de las dos candelas que los bomberos hallaron debajo del foco de incendio es la que tiró este joven.
Luego de que Chabán aportara este dato, el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 24 dispuso enviar una copia de su declaración en DVD al juez de instrucción Alberto Baños, quien continúa investigando quién arrojó la pirotecnia que inició el incendio.
"Estoy desesperado porque ya se sabe mi identidad. (...) ¿Dónde me meto yo ahora? ¿Quién me dice que salgo a la calle y no me va a pasar nada?", expresó esta tarde Vittone, con su voz nerviosa, en declaraciones radiales.
"Ahora me tengo que presentar a declarar y lo voy a hacer. Yo decidí hablar pero hasta ahora no había declarado porque tengo miedo", indicó.
Dijo que le teme "a la reacción de los padres (de las víctimas), de la gente que salió realmente perjudicada".
"Para mi éste es un testigo plantado. Lo que cuenta lo puede contar cualquiera leyendo los diarios, es raro que aparezca ahora después de cuatro años, pero es un problema de Baños que si lo cita, lo tiene que llamar a indagatoria", afirmó José Iglesias, el abogado que representa a la mayoría de los querellantes.
Tal como en su primera declaración del 15 de septiembre, Chabán realizó una declaración confusa y mezcló cuestiones del debate con numerosas citas de pensadores, filósofos y escritores, aunque a diferencia de aquella vez los jueces no lo reprendieron.
Vestido con jeans y remera grises, el acusado pasó al estrado con la revista y dejó en las cercanías tres cajas de colores con documentación que va a exhibir entre miércoles y viernes.
Poco antes, el juez Marcelo Alvero, que presidió el debate, pidió a los padres que bajaran las fotos de sus hijos muertos -a las cuales hoy le colocaron jazmines-, por lo que la mitad de la sala optó por retirarse y escuchar la declaración desde afuera.
Chabán sostuvo que las causa tiene tres bases fundamentales: que "como Cromañón tenía conexión con el hotel lindante no debería haber sido habilitado" y, por lo tanto, "no podía contar con el certificado de bomberos" correspondiente, que se renovó durante siete años seguido desde que el sitio fue abierto como "El Reventón".
Como segundo punto, expuso que como la pirotecnia tiene instrucciones, "era obligatorio tirarla a más de 60 metros de una persona y a 100 metros de cualquier cosa combustible", lo cual no se hizo en el local.
Y por último citó que "lo ocurrido fue algo fuera de lo común y no había nada que se pudiera hacer" para que la gente muriera.
Debido a que la mayoría de los testigos asegura que Chabán dijo esa noche que en el local había 6.000 personas, el ex gerenciador dijo que mintió con esa cifra y que lo hizo para que no se tiraran bengalas.
El imputado mostró una planilla de SADAIC que señala que al recital de Callejeros asistieron 2.611 personas y 200 invitados.
"Yo dije que había seis mil personas, pero estaba mintiendo, no decía la verdad, era un discurso de cuidado y lo dije exagerando para que el público se sintiera bien, porque eran muy cholulos. Mi sentido era la toma de conciencia", remarcó.
Chabán afirmó que la seguridad de esa noche "fue de Callejeros, pero fue extrema" y que el jefe de ese grupo era Lorenzo "Lolo" Bussi, quien no está siendo juzgado en este debate.
Pero para el principal acusado, "había un ardid, una estrategia para que entre la pirotecnia" al boliche y cuestionó que en la instrucción de la causa no se haya citado a los 30 hombres de seguridad que había esa noche.
Fuente/ 26noticias.com.ar
