En su homilía, el Pastor Diocesano hizo referencia a la unidad cotidiana que debe existir entre los vecinos, dejar de lado la envidia, la maledicencia, el hablar de los demás y, sobre todo, la división entre “buenos y malos” que, de modo soberbio y vanidoso, hacemos de los otros. Reflexionando sobre la lectura del Evangelio del día, resaltó que “ni el bueno es tan bueno, ni el malo tan malo”. Asimismo, los exhortó a vivir de acuerdo con las enseñanzas de Jesús y a convertir el corazón para dejar de sentirse superiores a los demás y ser misericordiosos con los que se equivocan.
La Virgen del Cerro
Al pie del Manchao se encuentra entronizada una imagen de la Virgen del Valle llamada Virgen del Cerro. Si bien no hay datos precisos de la fecha de entronización, desde hace más de 80 años la veneran todas las poblaciones que se emplazan a lo largo del Manchao. Para ello, es tradición que se la visite en dos oportunidades al año, en Semana Santa y el 8 de diciembre. En estas ocasiones se realizan celebraciones religiosas, que concentran a una gran cantidad de peregrinos y gauchos, que a veces superan los 200 jinetes.