La visita “Ad Limina” o “Ad Limina Apostolorum” es la visita que todos los obispos diocesanos del mundo deben realizar a la Santa Sede, aproximadamente cada cinco años.
Cada obispo diocesano informa individualmente al Papa sobre la situación particular de su diócesis, y mantiene contactos con diversos dicasterios vaticanos.
En esta oportunidad Mons. Urbanč celebró misas en las basílicas de San Pedro (Altar de la Tumba de San Pedro), San Pablo Extramuros, Santa María Mayor y San Juan de Letrán.
Ad Limina
La Visita Ad Limina Apostolorum (“A los Umbrales de los Apóstoles”) es la visita que todos los obispos diocesanos deben realizar a "los umbrales de San Pedro y San Pablo". El objetivo de la visita no es sólo visitar la tumba de los apóstoles sino informar al Papa, cada cierto período, sobre el estado de la diócesis que gobiernan. De esta manera, el obispo debe dar cuenta del estado moral y espiritual de su diócesis y todo lo relacionado con su gobierno.
FOTOS
1- Mons. Urbanč, junto al Papa Benedicto XVI, señala en el mapa la ubicación de la Diócesis de Catamarca en Argentina.
2- Obispo Diocesano entrega al Santo Padre un tapiz en nombre del pueblo de Catamarca.