La enmienda aprobada, que fue presentada por el ministro de Sanidad, Jean-Francois Mattei, estipula que queda prohibida en Francia "toda intervención que tenga como fin hacer que nazca unniño genéticamente idéntico a otra persona viva o muerta".
El texto prevé que quede fuera de la ley el "desarrollo de un embrión humano, que no haya salido directamente de los gametos deun hombre y de una mujer".. (Télam).-