(DIARIOC, 04/08/2008) De allí la reciente preocupación por los problemas de salud que pudieran causar los teléfonos celulares.
Pero no toda la radiación es dañina. De hecho, solo en las frecuencias extremadamente altas, como por ejemplo: La de los rayos x, las partículas electromagnéticas tienen suficiente energía para romper los enlaces químicos (por lo que este tipo de rayos pueden dañar el material genético de las células, causar cáncer o malformaciones). Sin embargo, este no parece ser el caso de los teléfonos celulares que utilizan frecuencias más bajas.
Lo que afirmamos, es que existe un elevado porcentaje de accidentes automovilísticos ocasionados por el uso de los celulares, por ejemplo, al hablar por teléfono los conductores no están concentrados en el manejo; o bien, los peatones cruzan las calles totalmente sumergidos en su conversación privada y no se fijan en los autos. El propósito del celular es tener movilidad y poder hablar desde cualquier parte, pero no necesariamente cuando se está haciendo otra cosa que requiera plena concentración.