El sistema de alertas, implementado en 2009 por el SMN, está basado en trabajos realizados por el organismo en base a la relación entre temperaturas máximas, mínimas y la mortalidad diaria en la ciudad de Buenos Aires, en la última década.
Esos estudios, reportó el SMN, "demuestran una relación entre las temperaturas y la mortalidad diaria en forma de "U", es decir, la población es susceptible a temperaturas muy bajas en la época invernal y a temperaturas altas en verano".
El cambio de alerta se produjo cuando el Sistema Energético Nacional tuvo a las 14.30 un nuevo récord de demanda, al alcanzar 21.982 megavatios, según reportó el ministerio de Planificación.
El récord se debió a "la ola de calor que afecta a todo el país", sostuvo el ministerio en un comunicado, y dijo que "este nuevo récord supera al anterior que había sido alcanzado el pasado 16 de febrero de 2012, cuando a las 15.10hs se ubicó en 21.949 megavatios".
El alerta mínimo dispuesto por el SMN es el verde, que prevé un mínimo estado de vigilancia durante el verano, sin peligro sobre la salud de la población, mientras que el amarillo determina que las olas de calor pueden ser peligrosas "especialmente para los niños, personas mayores de 65 años o aquellos con enfermedades crónicas", por lo que requiere tomar medidas de prevención.
El alerta naranja advierte que las olas de calor "pueden ser peligrosas, especialmente para los bebés y niños pequeños, personas mayores de 65 años o aquellos con enfermedades crónicas. Es necesario cumplir las normas dadas por el ministerio de Salud de la Nación frente a la ola de calor". En el caso del alerta rojo, el SMN manifiesta que se trata de "casos excepcionales de olas de calor. Pueden afectar a todas las personas saludables y no sólo a los grupos de riesgo".
Fuente: 26noticias.com.ar